El reconocido protector de la Danta de Páramo y sus ecosistemas, el ingeniero ambiental risaraldense Paulo Andrés Quintero, nos cuenta un poco cómo ha sido este trasegar en su bicicleta luchando por el cuidado de esta especie en vía de extinción. La Danta de Páramo es un tipo de Tapir, el Tapir es una especie de mamífero propio de Suramérica. La Danta es de su especie el mas pequeño y el único que vive en la altura del bosque alto andino. Habita solo en 3 países del mundo Colombia, Ecuador y Perú; en el nuestro se encuentra solamente en la cordillera central entre los 1400 y 4.000 m.s.n.m. Es decir, en una subida al Cóndor, a Gualí, a la Gruta, en una ida a Murillo, a la linda o al cedral en bici, podríamos toparnos con esta especie así que definitivamente nos estamos metiendo en su territorio por lo que es responsabilidad nuestra como ciclistas también conocer sobre su situación y cuidados.
Paulo es un hombre de 42 años, ingeniero ambiental, amante de la fotografía de naturaleza, del medio ambiente y del deporte principalmente del atletismo de montaña (Trade Running) en el que ha cosechado varios triunfos entre ellos tiene un récord personal de subir a la Laguna del Otún y bajar corriendo en 8h 45 minutos desde el Cedral en Pereira; ha corrido mas o menos 20 carreras entre media maratón y maratones completas; también amante del ciclismo sobre todo como medio de transporte, esta última una “herramienta de compromiso ambiental” como él mismo lo dice que nos permite ser responsables con este momento histórico en el tema ambiental según afirma. La tercera parte aproximadamente de su vida la ha dedicado a conservar el ecosistema de la Danta de Páramo, todo sobre ruedas. La relación de Paulo con el ciclismo en serio empezó hace aproximadamente 10 años, 4 años después de graduarse. Inició en el mundo del MTB Por diversión y deporte y luego como medio de transporte; ahora anda en su bólido azul, una bici de ruta con alforjas y demás.
Recién graduado de la Universidad Libre de Pereira empezó a trabajar en una compañía de reforestación en Túquerres Nariño, junto con la Alcaldía de ese municipio y la Gobernación de ese departamento; allí no tuvo una buena experiencia ya que fue testigo de primera mano de las artimañas que hacen los gobernantes en este país y las empresas privadas para robarse la plata como él mismo lo evidenció ya que trataron de hacer que él inflara presupuestos y demás a lo que obviamente se opuso y por lo que prefirió renunciar, como era de esperarse se devolvió con "una mano adelante y otra atrás” ya que además de todo no le pagaron lo que debían por no ser parte de la “mermelada"…LOCOMBIA!!!
Luego de ese episodio nos cuenta que decidió tomarse un tiempo y analizar además de su profesión cuáles eran sus pasiones, allí descubrió su deseo de trabajar por la conservación del medio ambiente, un perfil muy diferente al que se espera de un ingeniero ambiental de la universidad Libre según nos dice. La verdad es que no por eso se fue por este camino, mas bien lo escogió porque en sus caminatas una vez había tenido un encuentro con la Danta de Páramo en el Parque de los Nevados cerca a la Laguna del Otún, a 8 km de la Pastora a la altura de la zona del Jordán, mas o menos a 3.280 m.s.n.m; cabe anotar que esto es extremadamente raro, Paulo realmente tiene algo especial, una pasividad interior seguramente o un amor por la naturaleza que los animales perciben creemos nosotros porque ver una Danta de Páramo es muy difícil y él ha podido hacerlo varias veces. Su primer encuentro con este hermoso mamífero le produjo como a él le gusta llamarlo, un “enamoramiento” inmediato; entendible porque ver ese animal tan bello, tan escaso y tan tímido y que se quede ahí contigo varios minutos debe marcar la mente y los recuerdos de quien sea. A raíz de esto empieza una investigación exhaustiva de este animal, su ecosistema, sus hábitos, sus necesidades, la repercusión en su existencia por la invasión de los seres humanos a su hábitat, etc. Así nace entonces su proyecto CONSERVACIÓN SOBRE RUEDAS, iniciativa que trabaja en pro de respetar, conservar y si es posible hacer crecer el área de desarrollo de esta especie en particular y de todo su ecosistema.
Nos cuenta que en todo esto de las maratones que les describimos anteriormente, una vez quería ir a la media maratón de Bogotá, así que decidió irse en la bici MTB y aprovechar la vitrina de esa carrera tan importante en Colombia para dar a conocer esta iniciativa. Fue así como a puro pedal llega a Bogotá en su bici y con unas fotos de la Danta que él mismo tomó con el objeto de hacer una campaña de educación ambiental llega a la maratón y empieza su primer difusión del proyecto que aún de hecho no tenía nombre. Después de eso y de la retroalimentación tan positiva que le hicieron inició el recorrido en bici por el Eje cafetero visitando muchos lugares con el objetivo de contar un poco de la situación de la Danta generando consciencia y sensibilización, de esa forma nace la idea del nombre del proyecto CONSERVACIÓN SOBRE RUEDAS . Este tiene dos líneas, una línea de investigación que tiene que ver con seguimiento, fototrampeo, mirar cómo está su entorno y cómo se desenvuelve; y otra línea de educación ambiental dónde la bici cumple una labor determinante ya que básicamente le facilita llegar a lugares a él solo y de manera económica para repartir las fotos de la Danta en las escuelas donde están los niños quienes son los mas importantes después de la Danta en esta ecuación y a sitios donde para los carros es mas difícil llegar, además el silencio que le proporciona la bici ayuda a lograr su cometido. Paulo lleva 7 años con el proyecto CONSERVACIÓN SOBRE RUEDAS, solo, desafortunadamente sin ningún apoyo de las entidades gubernamentales, puro amor por la naturaleza y por la bici. El proyecto se centra en la Danta de Páramo y en sus ecosistemas de Bosque Alto Andino y de páramo y muy importante, debido a que la Danta es una especie sombrilla, es decir que sus ecosistemas cubren otras especies, también se trabaja indirectamente por la conservación del Puma y del Oso de Anteojos.
Queremos hacer énfasis en la importancia de poder llegar a las mentes de estos niños, llevarles esa información y ese conocimiento que sembrará en ellos esa semilla de conservación que le asegure a la Danta su existencia en el tiempo. Esa información no podrían verla de ninguna otra forma sino con las fotos y las charlas que les da Paulo; pocos documentales, noticias o libros se publican al respecto de esta especie y si los hay los niños de esas zonas no tienen forma de acceder a ellos; miren la importancia de la bici en este proceso que le facilita definitivamente al gestor su objetivo.
Paulo ha ido creando durante su trasegar en este camino en bici como el la llama, " la ruta de la Biodiversidad", esos lugares que ha visitado para educar a niños y grandes sobre la conservación de esta especie. El año pasado por ejemplo recorrió los 14 municipios de Risaralda, en esa ocasión lo patrocinó el Bio Parque Ukumari. En el Quindío ha recorrido municipios de altura como Salento, Córdoba, Pijao. Algunas zonas de Caldas de alta montaña como Villamaría y parte de la ruta del Cóndor hacia el nevado. De Tolima estuvo en Murillo, Santa Isabel, Casabianca, Herbeo. También ha estado en Cundinamarca, Popayán, Boyacá; en el Puracé, San Agustín entre otros. Ha logrado repartir 10.000 folletos, 10.000 postales, 2.000 afiches, 3000 stikers, mas de 300 gorras, posillos y rompecabezas, que han quedado en niños y comunidades de alta montaña interesadas en conocer de la Danta. 7 años financiados enteramente por él mismo; ahora el proyecto ha sido reconocido por muchos medios nacionales como El Tiempo, Caracol, Semana y esto ha facilitado llegar a componentes internacionales que apoyan proyectos de conservación, en eso está ahora. Tambien fue invitado a trabajar en la estructuracion del plan de manejo ambiental de la Danta de montaña de la cuenca media alta del rio otun, donde estan instituciones como la Carder, Parques Nacionales de Colombia, Unisarc y Conservacion de Tapires Colombianos (CTC), actualmente estan en este proceso.
Estamos muy orgullosos de contar con personas como Paulo que a punta de pedal logran metas que no son “volantes" sino permanentes y que le suman puntos a la conservación y cuidado del medio ambiente. Esperamos que la bici lo lleve en el 2022 a cosechar todo lo sembrado por la Conservación de la Danta…sobre ruedas.